Mientras Bitcoin es la reina entra las criptomonedas, obteniendo la mayor capitalización de mercado, Ripple es una de sus perseguidoras en el puesto número 3.
¿Qué es Ripple?
Ripple es tanto una red de pagos (RippleNet) y una criptomoneda (XRP) creada en el 2012. RippleNet sirve para conectar bancos y otras instituciones grandes, y permite transferir dinero y otros activos a través de la red. Todas estas transacciones son registradas en el libro mayor descentralizado de Ripple.
XRP es la criptomoneda en el sistema de pago para todas las transacciones, reduciendo tanto los costos como el tiempo, en especial en aquellas transacciones que se dan entre países. Cada transacción que lleva a cabo el sistema se realiza en escasos 4 segundos. Si lo comparamos con sus rivales, Ethereum toma 2 minutos, mientras que Bitcoin dependiendo de la congestión de la red puede llegar hasta mas de 1 hora. Eso sí, los sistemas tradicionales son aún peor, hablamos de tres a cinco días en algunos casos.
Lo bueno de esta criptomoneda es su escalabilidad, logrando alcanzar cifras de 1.500 transacciones por segundo. Esto difiere mucho de los tiempos de Bitcoin que solo puede manejar 7 en ese mismo espacio de tiempo. Por eso han nacido forks como Bitcoin Cash para solucionar este asunto.
A la par de la rapidez y la escalabilidad, Ripple tiene otra ventaja, los bajos costes de transacción.
Entonces la gran diferencia de Ripple con Bitcoin radica en que el primero es una red de pagos para instituciones financiera y compiten con sistema como SWIFT. Puede ser intercambiada, pero nunca fue pensada como un sistema de pago para comprar cosas online. Por su parte Bitcoin busca ser una moneda adoptada globalmente que pueda mejorar o incluso reemplazar el dinero convencional.
No a todos les gusta
Mientras que Bitcoin busca romper con el status quo creado por los bancos, ofreciendo una forma de pago que no los necesita, ni a ellos ni instituciones financieras, Ripple es todo lo contrario. Su objetivo es ayudar y hacer que estos sean más eficientes, reduciendo los tiempos de las transacciones tradicionales y los costos. Algunos ven entonces que Ripple va en contra de lo que las criptomonedas representan, por lo que no es muy bien recibida por la comunidad.
Otra crítica se encuentra en que no es del todo descentralizada como otras monedas virtuales. La compañía creó las monedas desde antes de ser lanzada y aún posee más de la mitad de todo el suministro.
¿Es una buena inversión?
Ripple por el momento cotiza a $0,68, haciendo que sea menos valiosa que Bitcoin y Ethereum. A diferencia de otras criptomonedas no se puede minar, sus 100 mil millones ya se encuentra creadas, mientras que solo el 40% se encuentran en circulación debido a que el resto están en posesión de la compañía.
La idea que tiene la empresa es liberar estas monedas gradualmente al mercado, mil millones por mes. Esto para mostrarles a los inversores que Ripple no va a vender todo el suministro de una vez en el mercado, lo que haría que su precio cayera.
Es difícil saber si Ripple es una buena inversión. Las criptomonedas han crecido mucho desde su introducción. Si hubieras comprado $1.000 XRP al comienzo del 2017 y vendido a fin de ese mismo año hubieras obtenido $40.000.
Pero es dificil de predecir cuál será el precio, si subira o bajara. Si Ripple puede asociarse con más instituciones como lo viene haciendo, y transforma así el sector, podremos esperar una subida meteórica de sus precios. De lo contrario la baja en el valor de la moneda será el camino más seguro para ella.
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