Shilling o Shillear es cuando una persona o grupo de ellas promociona un proyecto crypto en particular para crear hype alrededor.

Por lo general se suelen utilizar influencer y otro tipo de personalidades del ambiente para generar aún más emoción alrededor de la criptomoneda y alcanzar a más personas.

El objetivo de esta práctica es generar mucho hype alrededor de los inversores y conseguir que el interés generado se traduzca en la compra masiva del token o criptomoneda en cuestión.

Cuanto más demandado es, más compran las personas, aumentando así de nuevo la demanda en un círculo viciosa que empuja el precio hasta la luna.

Esto se relaciona estrechamente con el pump and dump, por el hecho de que se busca generar hype para que el precio aumente. Pero en el shillingn no necesariamente debe haber una estafa detrás, es decir, que solo se quiere aumentar el precio de la criptomoneda para luego vender engañando a las personas.

Puede que simplemente se busque un aumento del valor para darle más promoción al proyecto y que este siga creciendo.

Aunque claro, buscar aumentar su cotización por el simple hecho de hacerlo, independientemente de que no vayan a dumpear las criptomonedas luego, tampoco implica necesariamente que sea un buen lugar para invertir. Por eso debemos prestar atención a algunas señales.

Para evitar caer en estos engaños y comprar un token o crypto por un precio mayor a su valor natural, entonces debemos buscar indicios.

Claro que no será tan fácil como encontrar a alguien haciendo promoción muy simplista como que es el mejor activo del mundo y que gracias a ella te vas a hacer rico de la noche a la mañana.

Las señales son un poco menos obvias que eso, pero existen y te vamos a ayudar a descubrirlas para que no seas víctima.

En el mundo de las criptomonedas encontramos influencers de todas las redes sociales que participan en estos esquemas por su simple status de celebridad.

Esto les permite llegar a muchas personas, sus seguidores, y le dan cierta “confianza” al proyecto, porque uno pensaría que una persona así lo hace porque es lo correcto.

Su objetivo es alentar a las personas, tantos aquellos que son nuevos en el ecosistema, como a los viejos, para que inviertan en el proyecto. Por lo general nos da una serie de motivos por los cuales deberíamos hacerlo.

No todos los influencers que promocionen una criptomoneda o tokens tienen porque ser parte de un shilling, y es que algunos lo hacen sinceramente al no recibir ningún tipo de pago por la promoción. Lo difícil aquí es discernir eso, determinar si es que lo hace de forma desinteresada o ha recibido algo a cambio.

Por lo general, las pistas que nos hacen pesar que algo así podría estar ocurriendo es que de la noche a la mañana esta personalidad comience a hablar de un proyecto, en especial si nunca habías oído hablar de él antes.

Si comienza a hablar bien de él de manera repentina, entonces probable que se trate de una promoción paga y un intento de shillear.

El shilling no tiene por qué ser una acción concentrada en un grupo de personas en específico, puede que este fenómeno ocurra entre las personas individuales que buscan proporcionar la crypto que han comprado recientemente.

Además, cuando una criptomoneda comienza a estar bajos los efectos del shilling, es que muchas personas comienza a hablar de ella.

La promoción que hacen estas personas puede no parecer mucho, pero con que puedan convencer a uno o dos de que compren es suficiente para impulsar la demanda y su valor.

Pronto se vuelve como una bola de nieve que va a creciendo y lo podemos notar porque casi todo nuestro feed está hablando sobre el proyecto en sí. Tanto bien como mal.

Estos momentos de hype extremo, donde algo se ha vuelto muy popular, puede ser un gran indicativo de que estamos ante un shilling.

Las personas que crean estos proyectos lo hacen para verlos florecer, verlos crecer. Por tanto, buscaran cualquier método para que las personas se unan a la iniciativa.

Aquí tanto el fundador como los miembros del equipo intentaran promocionar el proyecto de cualquier forma posible. E incluso los primeros inversores, que ya han comprado la idea, también se unirán a sus fuerzas.

Como dijimos antes, no necesariamente es algo malo. Cualquier negocio lo hace si quiere que el mismo sea rentable, pero hay que tener cuidado si nos intentan vender más de lo que puedan abarcar.

Si notamos que el whitepaper o los materiales de promoción nos hablan de un proyecto difícil de creer, por un equipo sin mucha experiencia y todo parece apurado, entonces estamos ante un shilling.

Lo primero que debemos hacer es no apurarnos a poner nuestro dinero en un proyecto nuevo. El FOMO, o ese miedo a perdernos algo, puede llevar a que tomemos medidas apresuradas.

Una vez que hemos frenado nuestros impulsos, algunas cosas que podemos realizar son:

  • Hacer nuestra propia investigación (DYOR): lo cual nos permitirá encontrar los puntos más importantes por nosotros mismos y sin los sesgos de otra persona.
  • Analizar no solo la idea: a veces solo nos quedamos en la idea y no en el grupo de personas que serán los encargados de llevarla a cabo. La reputación de este grupo y la forma en la que están comenzando el proyecto nos puede decir mucho acerca del futuro.
  • No sucumbir ante el FOMO: ya vimos que el shilling tiene el efecto de hype en la comunidad, lo cual alimenta más el FOMO de perdernos algo valioso. Pero acá debemos tener la cabeza fría para invertir únicamente cuando hayamos obtenido la mayor cantidad de información sobre el asunto.
  • No ponderar a los influencers: los argumentos de alguien con muchos seguidores en las redes sociales no tiene por qué ser más importante que tu propio análisis. No dejes que este sesgo te lleve a cometer un error.

El shilling cuando se trata de inversiones tradicionales es una cuestión ilegal. Sin embargo, en este mundo de las criptomonedas no hay regulaciones claras, por lo que no podemos determinar que tipo de promoción es válida y cual incumple la ley.

Mientras no haya reglas específicas, debemos poner un esfuerzo extra para no caer en este problema. Que haya en el futuro no quita tampoco que debamos seguir prestando atención. La historia está repleta de ejemplos en donde, aun con controles del estado, las cosas no han salido bien para los inversores.

Resumen

  • Las pérdidas impermanentes son aquellas diferencias que existen entre hacer hold y utilizar un pool de liquidez.
  • Es una perdida que debemos tomar en cuenta, junto con las rentabilidades obtenidas, a la hora de invertir en estos vehículos de inversión.
  • Estas perdidas suelen ser mucho mayores cuando caen los precios que cuando sube, pero en definitiva tenemos perdidas siempre.